Fotobiomodulación con Terapia LightForce: intereses en el tratamiento de los desgarros musculares
El desgarro muscular es una patología frecuente en las consultas médicas, sobre todo para los profesionales que trabajan en entornos deportivos. A menos que esté en contacto directo con el deportista, estos pacientes no llegan a la consulta hasta varias semanas después de su accidente y, lamentablemente, deberíamos haber intervenido antes para reducir el tiempo de curación.
Es en este contexto de atención de urgencia donde la terapia LightForce demuestra toda su eficacia y su uso, completando así TODAS las fases del tratamiento.
En este artículo solo trataremos las lesiones intrínsecas del músculo, que son aquellas lesiones donde se supera la resistencia de la estructura muscular, no las lesiones extrínsecas que son un aplastamiento del tejido muscular contra la estructura o sea (contusión).
Las etapas de la lesión
Para conocer el estado de la lesión, se utilizará la siguiente clasificación.
El desgarro es una lesión grave que se produce antes de la rotura total y requiere intervención quirúrgica.
La clasificación de las lesiones puede hacerse según varios criterios:
--- Su severidad.
--- La anamnesis: lesión extrínseca o intrínseca.
--- La imagen: después de la ecografía o la RMN.
Epidemiología
Al ser una de las principales patologías en el deporte, el desgarro ha sido objeto de varios estudios.
Se sabe, por ejemplo, que dependiendo del deporte, la tasa de lesiones musculares varía del 10 al 55 %. Afecta principalmente a los hombres (90%) y las extremidades inferiores (90%).
Por orden de frecuencia, se encuentran los isquiosurales (37%), los aductores (23%), los cuádriceps (19%) y finalmente el tríceps sural (13%).
Hay que tener en cuenta un factor: la tasa de reincidencia, que se estima en un 16% (véase el 20% a nivel de los isquiotibiales).
Anamnesis
El desgarro es siempre significativo (puñalada), no permitiendo la continuidad de la actividad. Generalmente se produce edema con hemorragia in situ. La palpación permite evidenciar un dolor importante y muy localizado, el balanceo muscular es débil y doloroso, y las pruebas son todas dolorosas.
Los exámenes complementarios
Son principalmente de dos tipos. Aunque el examen clínico es generalmente suficiente, la ecografía o la resonancia magnética permiten confirmar la lesión y el estadio:
--- La ecografía, con un defecto: es operadora dependiente. Algunos clubes de fútbol profesionales esperan 48 horas antes de hacer este examen porque consideran que el examen no es lo suficientemente preciso antes.
--- La RMN, permite visualizar mejor la musculatura profunda. También facilita la toma de decisiones sobre los plazos de reanudación de la actividad deportiva. Es un examen que puede realizarse en cualquier momento.
Tratamiento con terapia LightForce
¿Qué acciones se buscan según la etapa de evolución?
El desgarro
Las acciones
En el desgarro, es importante conocer las fases citadas anteriormente para poder orientar nuestra acción. Cada fase se completará también con un trabajo fisioterapéutico u osteopático. Depende del / la profesional sanitario modular en función de la evolución.
En un primer momento: el desgarro se caracteriza por un edema, dolor importante y generalmente una hemorragia. La ecografía nos muestra una desorganización de la arquitectura muscular con pérdida de alineación de las fibras. El tratamiento será in situ, dirigido al dolor, dolor inmediato por disminución de la tasa de conducción de los nervios afectivos y disminución del edema.
En un segundo momento: varios fenómenos disminuirán el dolor: bloqueo neuronal, aumento de la perfusión tisular por liberación de NO.
También es conveniente disminuir la inflamación actuando a lo largo del proceso inflamatorio por disminución de las proteínas inflamatorias, disminución de Citocina pro-inflamatoria y liberación de Monóxido de Nitrógeno.
Por último, la terapia LightForce tendrá el efecto de actuar sobre la reparación y cicatrización de las fibras musculares mediante la producción de ATP.
En las primeras 24 horas, también puede actuar sobre el dolor agudo, por el fenómeno de Gate-Control así como la liberación de endorfinas tratando la raíz nerviosa correspondiente a la lesión.
Ejemplo de tratamiento de la raíz nerviosa para el desgarro de los isquiosurales.
Protocolo
El objetivo principal es una reducción significativa y muy rápida del edema y la hemorragia. Para ello es necesario tratar todos los días durante un mínimo de 5 días. A continuación y según la evolución, serán necesarias 3 sesiones por semana. Se adaptarán a las sesiones de fisioterapia para tratar con cabezales sin contacto al principio y después con cabezales con contacto.
La mayoría de las cabezales de contacto en este tipo de patología:
--- Gracias a la compresión, nos acercamos al tejido objetivo. A menudo los desgarros son profundos (ejemplo del cuádriceps).
--- Trabajar en la dirección de las fibras para un efecto «masaje» y reorganización de la alineación de las fibras de colágeno.
--- Trabajar simultáneamente con terapia manual.
Fases del tratamiento
Esta patología es ideal para la terapia LightForce durante todo el proceso de curación. Actúa en las tres fases de reparación de los tejidos: la fase de inflamación, la fase de proliferación y la fase de remodelación. Adaptará la potencia en función de la profundidad del tejido lesionado.
Ejemplo de desgarro de isquiosurales
Estado inflamatorio
Paciente en decúbito prono con cojín bajo los tobillos para relajar el plano posterior. Escaneo con cabezal sin contacto de la zona isquiosural incidiendo en la zona lesionada.
Energía de unos 5.000 julios (dependiendo del tamaño del desgarro).
Etapa temprana
Paciente siempre en decúbito prono pero con rodilla en flexión, permitiendo una relajación. Movimientos longitudinales a lo largo de los isquios con un cabezal de contacto Rolling Pin (rodillo) para hacer un drenaje global de la parte posterior del muslo. La presión se adaptará al dolor. Se puede suministrar una cantidad de energía un poco mayor, ya que la superficie es bastante grande (alrededor de 6.000 julios).
Fase de remodelación
En esta fase es importante enfocar con mayor precisión la acción de la terapia LightForce mediante el uso de un cabezal de contacto Roller Ball (bola de masaje). La retroalimentación del cabezal permitirá conocer el estado del tejido lesionado y actuar en consecuencia. Aplicar un mínimo de 5 a 6.000 Joules. También puede realizar estiramientos, ejercicios o terapia manual mientras aplica la terapia LightForce.
En el deporte
Aquellos que tratan deportistas no dudan en prolongar el tratamiento cuando se reanuda el deporte. De hecho, varios estudios muestran que la fotobiomodulación en pre-ejercicio como terapia autónoma es capaz de mejorar diferentes aspectos funcionales:
--- Relacionados con el rendimiento deportivo y los marcadores bioquímicos
--- Relacionado con el daño muscular y el proceso inflamatorio
Además, es importante destacar que la terapia LightForce antes del ejercicio tiene un interesante efecto antioxidante, siendo capaz de disminuir el estrés oxidativo inducido por el mismo.
Otros estudios sugieren que la suma de los diferentes mecanismos de acción son determinantes para mejorar la resistencia aeróbica y la recuperación post esfuerzo.
Por último, desde el punto de vista de la prevención de lesiones y la mejora del rendimiento, la fotobiomodulación administrada entre períodos de actividad física intensa es beneficiosa para un deportista para prevenir el riesgo de lesión.
Tratamientos complementarios
Los tratamientos complementarios son numerosos:
--- Para las lesiones de estiramiento y desgarro, la base del tratamiento es el reposo. A continuación, el protocolo RICE (o GREC o BREF) se aplica con mayor frecuencia. Atención: La aplicación de hielo debe realizarse a distancia de la aplicación láser, al menos 4 horas de intervalo.
--- El kinesiotaping es una opción interesante: para la relajación muscular, para una disminución del edema con una colocación en abanico sin tensión y en dirección distal.
--- Utilizar un aparato de electroestimulación es un excelente complemento. Al principio con un programa de capilarización, TENS. Posteriormente, podremos evolucionar hacia programas de fortalecimiento, y luego en función del objetivo y del grupo muscular hacia indicaciones más específicas.
--- Por último, pero no menos importante para los terapeutas, el uso de PRP.
Conclusión
Tratar un desgarro muscular con la terapia LightForce tiene muchos beneficios:
--- Acelerar el proceso de curación
--- Cicatrizar el músculo de forma más duradera
--- Adaptar el láser a la terapia manual
--- Facilita la recuperación deportiva minimizando el riesgo de recidiva
Nota: el dolor es una señal que no debe descuidarse. Si se produce y/o dura demasiado tiempo, es aconsejable consultar a un/una profesional de la salud.
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Autor: Bernard BONTHOUX, Osteópata DO, MKDE, consultor Chattanooga - ENOVIS
Fuentes / Ilustraciones : Enovis France y Enovis España
Bibliografía
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